La lucha contra «el mundo» comienza en nosotros; en nuestras familias. ¡Ahí es donde comienza!
Un esfuerzo por la edificación de la iglesia local.
Este sermón tiene un propósito enfatizar que el matrimonio es una institución divina, fundamental para la familia y la sociedad, y esencial para resistir las influencias mundanas. Subrayamos la importancia de comprender y obedecer el diseño de Dios para el matrimonio, enfocándonos en reflejar la unidad divina, la procreación, la adhesión al orden establecido y la crianza de los hijos según los principios divinos.